Fire Emblem Heroes – Análisis

Fire Emblem Heroes ya está entre nosotros con una propuesta muy fiel a los juegos de la saga pero con los cambios necesarios para hacerlo apto para dispositivos móviles.

Nintendo ha lanzado por fin su segundo juego para móviles (y no, Miitomo no cuenta como juego) y sigue la misma propuesta que hizo en su momento con Super Mario Run: darnos lo más clásico entre los clásicos pero cambiando lo necesario para que sea un buen juego de móviles.

¿Cómo se hace esto? Pues pensando mucho las cosas antes de hacerlas culpables. Y la verdad es que el resultado les ha quedado bastante pero bastante decente.

Para empezar, y como os digo, este Fire Emblem Heroes es un Fire Emblem en toda regla. Mantiene todos los elementos de la saga, como las diferentes unidades, sus características, los turnos, la estética y, sobre todo, las habilidades que llegaron con Fire Emblem: Awakening.

También se mantienen esa música tan característica de la saga así como el sistema de barracones (aquí palacio) que también llegó con el primer juego de Nintendo 3DS, donde podemos hablar con nuestras unidades y cambiar objetos por sus historietas.

Sin embargo, siendo un juego para dispositivos móviles, no podía llegar de la misma forma que el mencionado título de 3DS o el último, Fire Emblem Fates. Y por ello los cambios que ha habido lo han adaptado a las pantallas de nuestros móviles o táblets a la perfección.

Para empezar, ahora los combates son mucho más cortitos. Son como los clínex, de usar y tirar. La pantalla de combate es la que cabe en la de nuestro dispositivo y punto y pelota. Se trata de una cuadricula de 6×8 en la que podremos colocar hasta 4 unidades por nuestra parte y en la que tendremos enfrente a un equipo con entre 3 y 6 unidades enemigas en combates que durarán, como mucho, unos 8 ó 10 turnos.

El juego nos ofrece diferentes modos para echar el rato. Historia (no os esperéis nada del otro mundo), coliseo, eventos, torre de práctica… Luchar y derrotar los batallones enemigos nos permitirá avanzar en esos modos y conseguir experiencia para subir de nivel a nuestros héroes y para conseguir diferentes objetos que nos ayudarán a mejorar nuestras unidades.

Y he aquí donde entra el componente free to play, pero no el pay to win. Me explico. Hay una serie de objetos que nos permitirán seguir luchando en Fire Emblem Heroes e invocando guerreros. Energía, orbes, gladius, plumas de héroe, sellos, insignias, gemas, lascas… Cada una de ellas tiene una función, menos las gemas, que sirven para casi todo.

Evidentemente, este es el elemento que podemos adquirir con dinero real en el juego: los orbes. Nos permitirán invocar más guerreros, aumentar nuestro castillo, rellenar nuestra barra de energía, luchar en el coliseo… En definitiva, seguir luchando.

Sin embargo, lo que no nos permite es subir el nivel de nuestras unidades. Para ello tendremos que luchar o usar gemas y, sobre todo, sellos e insignias. Estos elementos servirán para aumentar la rareza de nuestra unidad. Y esto hará que tenga mejores estadísticas, ataques y habilidades.

Como os digo, esto no se puede comprar, y se consigue solamente luchando en determinados modos y como recompensas especiales, por lo que ya podemos comprar orbes que nuestras unidades serán las que invoquemos.

Evidentemente, puedes tener suerte y que te toquen unidades de 5 estrellas a la primera, pero solo ocurre en el 3% de los casos de invocación. Por ello os digo que esto es un juego para disfrutar jugando y entrenando a tus unidades. Coleccionar héroes, mejorarlos poco a poco y mimarlos hasta llegar a las 5 estrellas será todo un reto.

Sin embargo, y pese a todo ello, hay cosas que se les va de las manos. Subir a unidades al máximo nivel requiere mucha cantidad de elementos, y eso no se consigue ni en uno ni en dos días. Sino en varios meses, incluso.

Por ello la progresión en el juego puede ser algo lenta. Sobre todo cuando superamos los 9 capítulos de la historia por primera vez (cosa que se consigue con relativa facilidad y simpleza).

A partir de aquí comienzan los caminos tortuosos del free to play donde combatir para subir de nivel se convierte en una odisea por el coste en energía de cada combate (solo tenemos 50 puntos de energía), o la poca experiencia que recibimos.

Por suerte, como os digo, hay muchos niveles de dificultad en el juego principal, desde el normal hasta el experto, pasando por el difícil, y cada cual te da unas recompensas acorde con el reto.

Pero lo que más en falta hecho es el modo de jugador contra jugador. Posiblemente se añada más adelante, ya que el juego no está completo, ni en historia ni en modos, por lo que no perdemos la esperanza. Pero desde luego el coliseo, donde combatimos con los batallones manejados por la IA del juego, no es suficiente para satisfacer nuestras ganas de PvP.

Pero lo que tenemos delante es, en definitiva, un buen Fire Emblem pero adaptado a los dispositivos móviles. No es largo, pero sí es complicado, y conforme avancemos iremos viendo que el progreso es más lento. Pese a todo, consigue lo que busca: mantenernos enganchados el rato que tenemos energía y darnos ese toque de estrategia que nos gusta de los Fire Emblem.

Quizás lo peor del juego es su historia… demasiado forzada y con personajes sin carisma ninguno. Pero algo malo tenía que tener… ¿no?

Además, la optimización del juego hace que sea muy rápido de cargar y de manejar. Hay mucha fluidez en él y no hay tiempos apenas de carga, como pasa con otras aplicaciones (Pokémon GO ejem…). Los gráficos chibi le sientan de maravilla pero que no te engañen, hay mucho detalle en ellos, así como en la distribución de habilidades de cada personaje.