Motor Strike: Inmortal Legends es la última obra de FiveXGames, y es un juego muy curioso, muy interesante pero que pierde aceite por varios sitios.
¿Os imagináis un Mario Kart pero algo más bestia? Seguro que FiveXGames, creadores de Motor Strike: Inmortal Legends, están hartos de verse en una comparación de tal palo. Pero es que el juego es muy similar: correremos contra rivales a los que podemos “putear” para quedar por delante de ellos.
Con esta premisa básica arranca Motor Strike. Un juego curioso, muy interesante pero que, jugablemente, no está del todo pulido. Vamos a desgranar el título. Vamos a darle paso al análisis.
Jugabilidad interesante
La premisa de juego es, como ya he comentado, correr contra una serie de rivales a los que podemos fastidiar y destruir. Para ello contaremos con una cantidad de 14 coches a los que acoplar 6 tipos de armas que usaremos para “acariciar” a los enemigos.
Ambos elementos son de lo más variado y tienen su estilo de uso, eso es innegable. Los coches más “grandes” se notan más pesados y al golpear al rival, este sufrirá de lo lindo. Si llevamos algo más ligero podremos ponerlo a altas velocidades, aunque no será muy bueno embestir a los rivales. Encima, se inspiran en coches reales, como el Delorean de Regreso al futuro, el coche de Los Simpson, el Batmóvil de Tim Burton…
Del otro elemento que hemos citado también hay que hablar: las armas. Son muy variadas: ametralladora, misiles, láseres… Muy diferentes las unas de las otras. Y, encima, cada coche tendrá una habilidad especial que le permitirá ser más mortífero (normalmente relacionado con armas más “tochas”).
Pero ojo, saber utilizar las armas no nos garantizará ganar. Ganará el equipo que “mejor carrera” haga: el que pase antes por los puntos de control, el que elimine más enemigos o el que derrote más minions (coches no pilotados por nadie que “estorban”). Eso es muy interesante para darle un toque diferente al juego.
Otra cosa que mola mucho son los circuitos. Hay muchos: 10 a desbloquear pero que en realidad contienen otros tantos dentro. Son como “packs”. Al acabar pruebas en cada circuito recibimos puntos que utilizaremos para conseguir armas, coches y, por supuesto, más circuitos.
Pero todo esto queda algo manchado por la jugabilidad. Obviamente es un arcade: no pedimos simulación ni nada de eso. Pero sí un control intuitivo, que no falle y que se muestre real. Y en Motor Strike esto sucede alguna vez.
Conducir muy rápido puede ser peligroso, pues al frenar en seco, pierdes toda la estabilidad del vehículo. Chocas con un tronco de madera y pueden pasar dos cosas: el coche sigue o el coche vuela: es aleatorio. Utilizar “el gancho” es una lotería total (una herramienta que te devuelve al asfalto si nos salimos de la carretera). La protección contra misiles es complicada de acertar (no sabes cuándo bajará exactamente el misil).
Además de eso tiene carencias de contenido: hay únicamente dos modos para un jugador, Carrera Rápida y Modo Copa. Habría estado bien alguna inclusión diferente, un modo más alocado…
Por no decir que los rivales no es que nos pongan en “severos” apuros. Por carrera podemos morir a lo sumo una vez a manos enemigas, mientras que nosotros seremos capaces de cargarnos, fácilmente, a más de diez rivales. Quizá se eche en falta algo de dificultad (en niveles más difíciles los contrarios conducen mejor pero no nos matan más).
Por lo tanto, me atrevo a decir que el juego puede llegar a resultar repetitivo. Las carreras son divertidas, sí, pero es siempre igual. Corre, destruye y sigue corriendo. No hay modos más frescos. Con respecto al modo online, servidor ha intentado encontrar una partida con todas sus fuerzas, pero no ha habido suerte.
¿Qué hay del apartado técnico?
Por desgracia, se nota que FiveXGames no es un estudio como Ubisoft en recursos económicos disponibles, porque el apartado técnico hace serias aguas.
Empezamos por lo mejor: el sonido. Correcto: los misiles salen y suena como tal. La explosión suena como debe. El motor ruge. Todo correcto por aquí.
Pero hay un problema con los gráficos. Vale que no sean lo mejor en términos realistas, y es entendible ya que FiveXGames es un estudio pequeño. Pero el popping es bestial. En el mismo circuito podemos encontrarlo en más de dos, tres o cinco veces, lo cual es bastante desagradable.
También me ha pasado de vez en cuando que los elementos desaparecen de la pantalla. Tal cual: una palmera, una valla, lo que sea. Sin más, se evapora. Creo que en esta faceta se debería hacer un especial hincapié de cara al futuro.
Conclusiones
Motor Strike es un juego correcto. Es un juego divertido y entretenido (se pueden jugar hasta cuatro personas en una misma consola). Pero tiene una serie de flaquezas que le merman y pesan demasiado sobre el producto final.
Aún así, la intención del estudio es muy buena con Motor Strike. Personalmente quiero animarles a que sigan así porque han ofrecido un buen producto, aunque gotee por varios lados.
La entrada Motor Strike: Inmortal Legends – Análisis Playstation 4 aparece primero en GuiltyBit.