Un nuevo videojuego independiente de plataformas y puzles llega a PlayStation 4, de la mano del estudio de desarrollo Fiddlesticks y distribuido por Curve Digital. La propuesta de Hue – sí, yo también pienso que el nombre no es su fuerte – transporta al jugador a un mundo gris donde podremos manipular ciertos colores para resolver una gran variedad de rompecabezas.
Y ya está. Ya conoces básicamente la jugabilidad de Hue, pero en realidad hay mucho más.
Hay una invitación a disfrutar de una experiencia plácida como hizo con maestría Braid en la pasada generación. Hue es un juego que no presume de potencia gráfica, pues perfectamente podría jugarse en un móvil o tablet de hace años. Olvídate también de la acción. Aquí no hay de eso, sólo un cúmulo de puzles basados en el cambio de colores.
Pero hablemos de sus mecánicas. En Hue iniciamos una aventura en dos dimensiones con el salto como nuestra única acción. La historia presenta un mundo en blanco y negro donde pronto obtenemos el primero de nuestra futura paleta de colores. Bueno, acabamos de decir “un mundo en blanco y negro” pero no es del todo cierto. Algunos elementos son de un color sólido que si lo seleccionamos en nuestra paleta, el elemento desaparece.
Esta simple premisa nos inicia en rompecabezas que poco a poco se vuelven más complejos sin llegar a atascar. En determinados puntos deberemos combinar el plataformeo con cambios de color, mientras que conforme obtengamos más colores, más complicadas serán las situaciones.
El mundo de Hue cuenta con una buena cantidad de elementos de diferentes colores para proponer retos. Desde cajas que tendremos que empujar, rocas que caen hacia nuestro protagonista o rayos láser que nos impiden avanzar. Me siento obligado a destacar la original propuesta que permite diseñar buenos puzles simplemente alternando colores.
Por desgracia, y volviendo al tono inicial en el análisis, Hue sólo es eso. El juego carece de enemigos y otros ingredientes tan demandados por el jugador. Quizás no te apetezca tener una PlayStation 4 para esto. Es comprensible, pero es ideal para aquellos culpables que quieran relajarse con un juego que te hace estrujarte un poco el cerebro.
Hue está también disponible en PS Vita, Xbox One, Windows, Linux y Mac, con textos en español y voces en inglés. Sólo es para un jugador, pero cabe decir que existe un modo daltónico que a cada color le asigna un símbolo, por lo que nadie tiene excusa para perderse esta oportunidad.
La propuesta de Hue en PlayStation 4 es simple y sencilla, pero deja un buen sabor de boca para aquellos jugadores que deseen disfrutar de momentos tranquilos resolviendo puzzles. Con un buen componente de plataformeo, su mecánica se basa en manipular colores que vamos consiguiendo para superar obstáculos. Nos quedamos con la sensación de que podía haber sido más pretencioso, pero no deja de ser una buena propuesta para los amantes del género.
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